¿Qué quiere el barcelonismo?
A falta de 8 semanas para que concluya la temporada, el Barcelona aspira aún a 3 títulos. Con un fútbol elegante como el cashmere, las pinceladas que Guardiola le ha dado al equipo nos permite a los culés estar en una posición privilegiada.
Pero curtidos como estamos en este deporte, sabemos de la dificultad de alzar la triple corona. No lo veo imposible, pero si me atornillo al realismo creo que lo más sensato es la obtención de uno o dos títulos.
Y aquí es donde os planteo, ¿cuáles?
Sabemos que la Copa del Rey es un torneo menor, uno de los que dan prestigio en las estadísticas, pero que poco cuentan para el aficionado que gusta de adrenalina más desafiante como la Liga o la Champions.
Creo no ser el único culé que está entre la dicotomía del torneo local, el de la regularidad, o la Champions, el del mayor prestigio y con el que tenemos una deuda pendiente. Dos Champions para un conjunto de la alcurnia del Barcelona son migajas, mientras que sólo haber conquistado dos Ligas en los últimos 4 años con uno de los equipos más competitivos que hayamos tenido, frente a un raquítico y desmembrado Real Numdrid, es una auténtica verguenza.
Si me viera obligado a sacrificar un título, ese sería la Liga, por más que el Real Madrid se la lleve. Una Champions da prestigio, es el torneo de los grandes, del que deberíamos tener unas 5 o 6 copas en las vitrinas del Camp Nou.
¿Y la Liga?
Si las fuerzas se han de centrar en algo, que sea en Champions, pero no por ello quiero decir que se tire la Liga.
El Numdrid viene fuerte, pero no por juego, sino por chorra y prebendas arbitrales orquestradas por Alfredo Relaño. Luchar contra ello es sumamente difícil, pero estoy seguro que el Numdrid caerá unas dos o tres veces de aquí a final de temporada.
Ojalá el Barcelona mantenga el tipo. Pero reitero, si me dan a elegir entre uno u otro. Champions, cien mil veces más Champions.
Aunque me jodería como pocas veces que la dictadura madridista se llevara un campeonato que democráticamente se lo ganó el Barcelona con mucho merecimiento.