Una de médicos...by 3B

Hospital Gregorio Hebrón 14:00h – Sala de Urgencias

Josep Joan Fontanals llega por propio pie hasta la ventallina de admisiones. Allí una dulce recepcionista inicia su protocolario dialogo.

“Me ha vuelto a dar”, Fontanals mostraba indicios de haber sufrido otro de sus numerosas subidas de tensión a causa de un calentón. Su trabajo no ayudaba a disminuir las recaídas, cada vez con más responsabilidad y con más tareas que cubrir. Últimamente se habían ido o despedido a bastantes empleados y este hecho siempre es un trastoque. Pero Fontanals es fuerte y decidido, incluso en estos tiempos tormentosos había osado intentar el asalto a la alcaldía de su pueblo y por lo que parece con posibilidades. La mochila del estrés y cansancio comienzan a pesar, y su barriga también.

La enfermera llama al médico y éste reconoce enseguida a Fontalans. Ya van unos cuántos sobresaltos de esa índole y ahora decide atajar el problema más en serio. Ingreso para pruebas, ya. Josep J. vacía sus bolsillos dejando las llaves de piso nuevo, cartera, peine y en pequeño frasco de perfume Flavian en un gran sobre; se quita los pantalones…bueno, todo eso que se hace cuándo alguien ingresa en un hospital para que recrearnos.

Los boxes están a tope y le toca compartir sala con otro señor. Algo mayor que él, complexión normal y con un moreno paleta posado en su piel. Resta inmóvil en un estado comatoso, como si fuese un faraón o un santo en su descanso eterno. Cuándo se queda sólo, Fontanals, se dirige a curiosear a su vecino. Pilla su parte médico y lee lo más rápidamente posible temiendo la entrada de un/a enfermera/o: “Crisis de ansiedad…Coma inducido…Inflamación testicular con tonos azules y rojos en la piel…94ml de CR…Mucha caca…” Fontanals deja el parte patosamente porque le está entrando pis con el miedo a ser pillado de pie y haciendo el paparazzi.

“Coño, el tío este pinta mal”piensa JJ. Efectivamente, el señor Cementino estaba mal. Trabaja con plenos poderes en una empresa familiar dónde ha invertido mucho dinero pero no acaba de encontrar con la fórmula perfecta para levantar el vuelo. Y es que en este tipo de empresas no puede echar a nadie por ser familia, él trabaja más que nadie, quiere controlarlo todo para contentar a todos. Tarea imposible. En su falta su sobrino Raulito esta ahora al mando, algo de tranquilidad para Cementino. Raulito lleva muuuuchos años en la empresa, hasta sabe inglés. Perfecto. Pero a Cemen no le sobra el tiempo y necesita remedio ya.

Pasadas unas horas el médico y con las pruebas en mano - ¿Había dicho que era el mismo médico para ambos? Pues eso – descubre como un House de la vida el remedio ideal: con 30ml de Cescanol problema solucionado. Rápidamente el colegiado envía a la interina Cris Povero, ella con jeringuilla en mano se dirige veloz como un caballo hacía el box. Que ilusión le hace la confianza que le ha dado el médico con una tarea de tal magnitud, que felaciones tan bien invertidas. El destinario de la dosis por fin quedará libre de su angustiosa agonía, Cementino necesita que el Cescanol cure su cerebro de inmediato.

Josep Joan espera ya más relajado en su cama, incluso tararea algo de los Beatles o los Stones (siempre los confundo). Resta ajeno a que en su falta de discreción ha cambiado las carpetas de los partes. Cris, la enfermera con cuerpo de vampiresa, entra en acción y chuta la dosis a Cementino, en este caso Josep Joan Fontanals.

Casi a la vez, una hora más tarde y con el turno cambiado, Cementino entra en parada y el afeminado doctor Gutiérrez intenta salvarle a la vez que maldice que siempre le tocan los “muertos” del otro turno, hecho que le saca de sus casillas.

Al anochecer Josep Joan Fontanals ya está en casa, un precioso ático con bella hipoteca. La curación de su mal obliga a que deje uno de los dos quehaceres principales y que cuente hasta 10 antes de insultar ¿O eran 10 insultos antes de estallar? Da igual, lo que debe priorizar es el 10 supongo. Con unas pastillitas de colores XSM y unos supositorios Meto3 puede ir tirando. Mientras Cemen sigue vivo pero su cerebro esta malfuncionado, si despierta quedará con las áreas en las que reside la creatividad dañadas. No importa mucho, jamás las ha usado.

Hay que seguir trafajando: En mejorar el remedio, parece que el Cescanol cree la misma ilusión que la Karembetina, que al final resultó ser un placebo.

Gallina de piel: Para hacer el post no se ha maltratado ni dañado a ningún animal. Pero cuándo he ido a buscar el pan he pisado a un gato con el coche. Tranquilos aún vive, el cabrón.